La Semana Santa es uno de los acontecimientos del año que más gente convoca en las calles de Tortosa. Aparte de su sentido religioso, muchas personas van a ver las procesiones, particularmente la de la Pasión o de Domingo de Ramos, la más madrugadora de Cataluña, colorista y concurrida, atraídas por la atmósfera de recogimiento que se respira por las calles de la ciudad, por donde desfilan cientos de penitentes acompañando los once pasos que ilustran la Pasión y muerte de Jesucristo. Cultura, religiosidad y patrimonio se entrelazan en una de las manifestaciones más singulares de nuestra ciudad.
Además de la de Domingo de Ramos, la Semana Santa en Tortosa tiene también la procesión del Santo Entierro, que sale el Viernes Santo con los pasos que escenifican la Muerte de Jesús, más el del Cristo Yacente del Santo Sepulcro de la Catedral, acompañado de nazarenos, penitentes y magdalenas. La medianoche del jueves al viernes, y recuperada hace poco más de veinte años, la procesión del Silencio recorre calles y callejones del centro histórico de la ciudad ofreciendo una de las imágenes más auténticas y cautivadoras de la Semana Santa tortosina.
La Semana Santa dura unos pocos días pero en Tortosa podemos disfrutarla todo el año, gracias al Centro de Interpretación de la Semana Santa, un equipamiento ubicado en la antigua iglesia de San Antonio donde se exponen los pasos de la Semana Santa, verdaderas obras de arte al alcance de la ciudadanía, que puede apreciar la belleza de los misterios y comprender el sentido de este evento único.
